Uno de Mil

Caen y caen los cuerpos, no muchos vienen completos y algunos llegan descompuestos, pero no dejan de caer a ese negro agujero sin fondo, se amontan uno sobre otro, creando un cerro de dolor y sufrimiento, un cerro de corazones negros. Arriba brilla el sol, pero aqui no hay más que oscuridad, ni la luna se logra apreciar. Una estrella baja y choca contra un cuerpo, de apoco abre los ojos y sonríe, comienza a subir por la escalera del paraíso, que por cada escalon que sube va desapereciendo, hasta llegar hasta arriba donde descansará en paz.
Luego, siguen los cuerpos cayendo, todos llenos de amargura y rencor, algunos llenos de odio, pero nuevamente a uno le cae la estrella, que lo hace sonreír y decir: "Me he dado cuenta que son pocos los que se salvan, pero ellos son los que trataron salvar el mundo, es por eso que todos viven igual".